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Cultura

Haydée Milanés: 'No es fácil alzar la voz desde Cuba'

La cantante cubana habla sobre sus últimos meses en la Isla y sobre la decepción de su padre, Pablo Milanés, con la Revolución.

Madrid
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La cantante cubana Haydée Milanés. DDC TV
Haydée Milanés.
Haydée Milanés. Cortesía de Haydée Milanés

La noche de este viernes la cantante y compositora cubana Haydée Milanés ofrece su segundo concierto en Miami. Horas antes, ha conversado con DIARIO DE CUBA sobre el repertorio de esta presentación, sus últimos meses en Cuba, el reto de "alzar la voz" estando en la Isla y la decepción de su padre, Pablo Milanés, con la Revolución.

¿Cómo fue el primer concierto en Miami y qué has pensado para el concierto de este viernes en esa ciudad?

El primer concierto aquí, en Miami, fue muy lindo; lo realizamos en marzo en el Flamingo Theater Bar. El público fue súper bonito, muy receptivo, una gran experiencia. Ahora, para esta ocasión, he montado temas nuevos, con algunas canciones que he incorporado al repertorio, otras que no son nuevas pero que no las hice en el concierto anterior, y además tengo un invitado muy especial que me va a acompañar. Estoy muy contenta porque estos días de ensayo he visto que la banda está sonando maravillosamente. Acaba de llegar un músico con el toqué allá en Cuba varias veces, un trompetista que se llama Thommy Lowry, y la banda está increíble, todos son músicos cubanos que viven aquí, mucha gente que ha venido para acá. Tengo muchas ganas de cantar, me encanta el en vivo, compartir con el público.

¿Cómo fue pasar de ser una artista que hizo giras nacionales en Cuba a tener que producir tus propios conciertos?

Yo realmente hice una sola gira nacional, fue en el año 2009, después de eso intentamos organizar otras y siempre había un pretexto. O no había gasolina, o no había transporte, o no había hospedaje. Luego, los conciertos siempre los producía yo, invirtiendo para poder realizarlos. Al final, ni siquiera haciendo yo la producción era fácil preparar un concierto, porque sentías que te empezaban a poner trabas constantemente. Cuando no era una cosa, era la otra; además de que ya, por ejemplo, en el noticiero no se podían hacer menciones sobre mí en las noticias culturales, en la prensa tampoco, había comenzado a recibir ataques de medios que son voceros del Gobierno.

¿A qué crees que se debió todo eso? 

Creo que tiene que ver primeramente con mi padre. Desde hacía muchos años él venía pronunciándose, dando sus criterios sobre las cosas que pasaban en Cuba, pero sobre todo después de la gira que dio por Estados Unidos, sobre todo el concierto que dio aquí en Miami, donde hizo algunas declaraciones que molestaron mucho al Gobierno cubano. Siento que de alguna manera eso me tocó a mí también. Yo en ese momento, cuando daba conciertos fuera de Cuba y me entrevistaban, hacía igual mis críticas. También con el acceso a las redes sociales empecé a decir las cosas que pensaba y hacer algunas denuncias. Es ahí cuando te empiezan a cerrar las puertas, empiezas a sentir que no quieren que estés en Cuba, que no quieren que hagas cosas, que quieren que te vayas. Es un proceso que es poco a poco, pero llega el momento en el que dices, "aquí ya no puedo hacer más nada".

Participaste en la marcha del 11M en Prado, denunciaste varios actos represivos de la Seguridad del Estado estando en Cuba, condenas, injusticias. ¿Qué precio tienen que pagar los artistas que se posicionan sobre hechos como esos?
 

Definitivamente, pronunciarse en Cuba, decir cualquier cosa que no esté en la línea del discurso oficial y denunciar cualquier acto represivo o hablar de la censura, de la falta de libertad, de los abusos, los encarcelamientos, todo eso es castigado; con cualquier persona que se atreva a eso en Cuba se toman medidas. Te castigan de diversas formas, te pueden mandar mensajes, a mí me mandaron mensajes, incluso con personas de mi familia: "esos comentarios que están haciendo están fuera de lugar", cosas así. Lo que pasa es que una quiere tratar de dormir tranquila, estar en paz con su conciencia, es muy difícil estar viviendo todas esas cosas y quedarse callada.

Lo otro es que yo sentía que de alguna manera podía ayudar dando a conocer las cosas que pasaban, por supuesto que no hablaba de todo, porque estaban pasando muchas cosas. Uno también tiene problemas personales, no es fácil desde Cuba alzar la voz, pero yo sentía que cuando lo hacía estaba ayudando a visibilizar algunos temas y creo que eso era importante, y que era justamente lo que molestaba

¿Cómo fue la Cuba que dejaste? ¿Cuánto te afectaba y qué fue lo más difícil de los últimos meses en la Isla?


Primeramente, ver la depauperación general de todo en el país, nada funcionaba. Ver la miseria en la calle, cómo la gente tenía que hacer largas colas para el pollo y, por supuesto, todas esas cosas me tocaban a mí también; una cosa muy triste.

Encima de eso, se tomaron las peores medidas en medio de la pandemia y de la peor manera: el "ordenamiento" monetario, que trajo una inflación en la que a la gente el dinero no le alcanza para nada porque todos los precios se dispararon. Además de todo eso, sube diez puntos la represión. Vives eso y no te puedes expresar, no te puedes quejar de todo lo que está sucediendo. Entonces, es ya un abuso terrible. Además de que las cosas no están bien y es prácticamente imposible vivir en Cuba por cuestiones elementales de alimentación, no me puedo expresar sobre los cambios que quiero o quejarme de lo que no funciona. Se trata de un sistema que no está trabajando en función del pueblo; entonces, ¿qué es lo hay que aplaudir?. No veo nada que haya que aplaudir o celebrar en Cuba desde hace mucho tiempo.

La decepción de Pablo Milanés con la Revolución se hizo cada día más evidente. ¿Cómo vivió él ese proceso?

Eso tuvo diferentes momentos. Al principio, cuando triunfó la Revolución, mi papá era muy joven, tenía 17 años. Para él y para muchos fue una gran ilusión, un momento de pensar que todo iba a ser muy positivo y que habría justicia social para todos. Poco a poco fueron sucediendo cosas. A mí papá se lo llevaron a las UMAP, a finales de los 60, porque él pertenecía a un grupo de muchachos que no estaban exactamente caminando por la línea que correspondía; daban sus criterios, que no eran exactamente lo que pedían que fuera ese hombre revolucionario, ese "hombre nuevo". Se vestían y peinaban de una manera que no encajaba, y se sabe que al principio ese grupo de artistas no era bien visto, incluso estaban censurados en aquel momento. Fue gracias a Haydée Santamaría que empezaron a ser tomados en cuenta, pero en esos primeros años siguieron pasando cosas. Llegó el año 1968, con la invasión de los soviéticos a Praga con los tanques... fue la primera gran decepción de mi padre, le pasó a mucha gente.

La otra gran decepción fue cuando se cayó el campo socialista. Él pensó que en Cuba se iban a hacer cambios importantes, teniendo en ese momento el Gobierno la oportunidad de ser realmente independiente de los soviéticos y darle verdaderas oportunidades a los cubanos para que pudieran emprender y sacar adelante un país, y no se hizo. Luego pasaron muchas cosas, abrió la Fundación Pablo Milanés, empezó a poner ahí todo su dinero. Quería ayudar a jóvenes artistas. Por su puesto que eso no cayó bien al Gobierno, porque eran artistas que no eran tomados en cuenta por las instituciones culturales. Él se batió, varias peleas que tuvo que tener para hacer esas cosas. No obstante, pudo ayudar a muchos artistas a grabar discos.

Luego fue elegido diputado por Los Sitios, en La Habana Vieja. En ese momento, pensó que podría hacer cosas por ese lugar, que es de los más pobres que hay en la zona. Estando ahí se dio cuenta de que no podía hacer nada, que lo que querían las autoridades era que él pusiera la cara, pero que no hiciera nada. Tuvo varios intentos de hacer cosas, pero nunca pudo, no lo dejaron. Fue el primer diputado que renunció a Asamblea y fue el primer gran rompimiento de mi padre con ese proceso. Eso luego fue in crescendo. Al final hubo muchas cosas a las que se opuso, que denunció, y por eso se pasó mucho tiempo bastante solo. Prácticamente ningún artista se pronunciaba con respecto a las cosas que estaban pasando en Cuba, y estuvo muy solo durante mucho tiempo.

Ese momento de su visita a Estados Unidos fue medular, ahí recibió un ataque directo de toda la prensa oficial, también le viraron la cara muchísima gente, incluso cercana. Cuando llegó de Estados Unidos tenía una patrulla afuera de la casa, le cerraron las puertas de la televisión, para hacer un concierto no se podía ni sacar un artículo en la prensa nacional, y así empezaron a pasar cosas hasta que llegó lo del último concierto, que fue tremendo.

¿Cómo vivió Pablo Milanés ese momento? ¿Fue un concierto de despedida?

Eso fue un trampa que quisieron hacer. Supuestamente le habían dado el espacio que él pidió para ese concierto, la sala Avellaneda del Teatro Nacional, que tiene capacidad para unos 2.200 espectadores. Pero lo que hicieron fue que, 15 días antes de comenzar a vender las entradas al público, le vendieron entradas a instituciones, ministerios, cuadros, gente de su confianza. Querían asegurarse de que no sucediera nada dentro de ese concierto. Hacía poco tiempo había ocurrido el concierto de Carlos Varela, donde el público se puso a gritar "libertad", y ellos tenían mucho miedo de que pudiera pasar algo así en el concierto de mi padre, sabiendo además el criterio de él con respecto al Gobierno y su pronunciamiento sobre el 11 de julio, cuando hizo declaraciones contundentes a favor de los manifestantes.

El día que fueron a vender las entradas, solamente sacaron unas 200 a la venta, y era para el tercer balcón. La gente se puso muy molesta porque eran muchos los que querían encontrarse con él y que estaban haciendo cola desde el día antes. Protestaron, salió en las redes y llegó a los oídos del equipo de mi papá. En ese momento decidieron solucionar eso y virar el asunto de las entradas. Desde el Ministerio de Cultura dijeron que no había forma de hacer eso y entonces desde el equipo de mi padre propusieron cambiar el espacio. Del otro lado hicieron mucha resistencia porque no querían perder el control, pero en gran parte gracias a la presión que ejerció el publico que estaba haciendo la cola en el teatro junto al de las redes sociales, se logró que le dieran a mi papá la Ciudad Deportiva para el concierto.

Por supuesto que esto era un concierto de despedida. Mi papá llevaba años muy enfermo, él sabía que estaba muy mal y quería cantarle por última vez al pueblo cubano. El público también sentía de alguna manera que mi papa se estaba despidiendo. Pienso que lo importante es que finalmente se pudo hacer, bajo unas condiciones tremendas, pero se pudo. Hubo una seguridad increíble, nosotros entramos como público y vimos como te revisaban todo para ver si tenias algún cartel. En la entrada estaban revisando a uno por uno de la cola y un había operativo enorme de la Seguridad del Estado, gente de la Policía vestida de civil en todos lados. Por suerte había también mucho del público de mi padre, emocionados de escucharlo. Fue un concierto muy emotivo, en el que mi papá le dedicó unas palabras al público, diciéndole que gracias a él se había logrado el concierto y que era el mejor público del mundo.

¿Para el concierto de este viernes qué repertorio has preparado?

Este concierto es para celebrar el día de los padres. Será también en el Flamingo Theater Bar. Tengo una banda maravillosa y vamos a tocar temas nuevos, una versión nueva de "Yolanda" en salsa. He montado un tema de Joaquin Sabina que se llama "Soledad"; tengo un invitado muy especial, Pavel Urquiza, un músico al que admiro muchísimo. Con el que hice una canción de su autoría muy hermosa que se llama "Regreso a la tierra". Hemos hecho una versión especial para este concierto con banda. Para mí es un honor tener a este maestro de la música en mi concierto. También haré otras canciones que no hice en el concierto pasado y, claro, las que no pueden faltar, que el público siempre pide, canciones de mi primer disco, de mi papá, los boleros, y siempre con los deseos de vivir un concierto y disfrutarlo como si fuera la última vez.

En Cuba estabas preparando un nuevo disco, ¿en qué proceso se encuentra?

Ese disco está en mezcla y masterización, pero ahora quisiera sacar un material con canciones mías, algunas en coautoría con Kelvis Ochoa. Hemos estado componiendo mucho, estoy muy feliz con esas nuevas canciones. Aquí he seguido componiendo, ya estamos en proceso de preparación de ese material porque hace varios años que no grabo y también llevo tiempo dedicándole discos a grandes autores, como Pablo Milanés y Marta Valdés, y creo que va siendo hora de que saque un material con canciones mías, donde se vea un trabajo más personal.

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8 comentarios

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Pablo Milanes, además de haber sido un gran cantautor que estuvo bastante comprometido con el régimen hasta el día que le pisaron los callos, fue un gran ser humano que nunca le hizo daño a nadie en la isla a como sí lo hicieron unos cuantos que pululan por aquí, quienes ahora presumen de ser acérrimos anticastristas.
Pablo probablemente arrastró consigo hasta sus últimos días el estigma de la pusilanimidad frente al régimen, pero esos valientes personajillos, por mucho que ahora critiquen a ese régimen, jamás van a poder desprenderse del estigma que les acompaña.
Ellos lo saben muy bien.

Eso es una gran verdad; a los que lo hacen , le apagan la voz. Por otra parte; muy pocos lo oyen, dado que en Cuba no hay unidad todas las familias son entes aislados, y en todos los lugares funciona la desinformación; no es fácil tener Internet, y la mayoría de los que la tienen, la utilizan para lo indispensable. La desinformación y las penurias se comen al cubano de a pié. Lo que más mueve a protestar al cubano de a pié a protestar son los apagones, pues estos te dejan sin luz, sin agua, se te echa a perder la comida, etc.; El resto de las cosas son una cosa común más, dentro de la mente del cubano, que no tiene paz desde hace más de 60 años. No se olviden; la gente habla después que sale de Cuba, pero dentro, la mayoría, tampoco hablaron.

Nada tengo que criticarle a su padre pues vi muchos actos en contra de la dictadura si ademas aqui en Miami vi a Osvaldo Rodriguez den TV scomo si nada y hace dias murio Martin rojas y todos callado y compuso un himno como Siempre es 26.

Pablo Milanese fue, ademas de un arista genial, muy honesto. Cuando Creo en El desastre que es la Revolution Cubanas, lo canto. Cuando comorendio que SE equivoco, lo dijo sin miedo. Ya desde Cuba, no desde El Versailles. Ademas de SER UN Gran artistas fue siempre UN Gran ser humano. Solidario - cuando aun creia - con los artistas que habian caido en desgeacia. Los ayudaba, el Caso del caricaturista Guerrero es UN ejemplo, practicamente lo mantuvo cuando nadie lo ayudaba. Soy testigo de SUS gestos. Desde mi columna de El Nuevo Herald lo critique por su reaction, que considered tibia, cuando le cerraron la foundation donde ayudaba a los artistas que El regimen tachaba y desde estas mismas paginas lo apoye cuando los resentidos o envidiosos lo quisieron sacrificar mediaticamente en UN concierto en Miami. En Miami viven ex miembris del PCC, funcionarios del Comiste Central y hasta represores. Pablo hizo sus criticas desde la Isla y ESO fue un acto de Gran Valentia. Por ESO es amado.

Pablo Milanes escribio la cancion "yo me quedo", pero al final se fue a vivir a España. Jaja. Salio pirao el tipo.
Haydee deberia hacer una cancion como "yo pisare las calles nuevamente" pero dedicada a Cuba. Pablo se nos quedó debiendo esa cancion.

Profile picture for user Weston

Muy buena la entrevista y mejor las declaraciones de la Sra. Milanés.
La he escuchado varias veces y me parece que lo hace bien.
Ojalá que siempre mantenga en su reperterio varias canciones de su padre.
Esas canciones inolvidables de Pablito que retumbaron en el AA Arenas varios años atras, ahogando los gritos histéricos de los combatientes de la aplanadora.

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Papo y tú como siempre tranquilo sin meterte con nadie. Siempre escondido detrâs de las gradas difamando y desprestigiando al exilio histórico, los disidentes, los presos y todo aquel que se atreve hacer en Cuba lo que para ti era impensable, of course. Eso de las protestas o la disidencia no va contigo, para eso se necesita dignidad.

Profile picture for user Weston

Bueno, aparte de dignidad necesitaban una aplanadora para pasarle por encima a los CD de Pablito.