Madres cubanas llevan el peso de la prisión política de sus hijos: 'Nos toca gritar'
DDCMadrid 1Un manifestante del 11J pide solidaridad por los presos con enfermedades mentales que sufren malos tratos y discriminación en la cárcel cubana.
Un manifestante del 11J pide solidaridad por los presos con enfermedades mentales que sufren malos tratos y discriminación en la cárcel cubana.
'Hoy es un día de esos de cuando era niña y me regalaban un juguete nuevo', afirma su madre.
El preso político debe cumplir allí el resto de su condena de cinco años.
Yindra Elizastigui explica a DIARIO DE CUBA que se ha convencido de buscar 'otras formas' para luchar por la libertad de su hijo.
El profesor Pedro Albert también se niega a ingerir alimentos y agua desde su arresto, denuncia Justicia 11J.
Las autoridades niegan la libertad condicional a la activista Taimir García y la presa política Mayelín Rodríguez está con fiebre y sin atención médica.
Su madre asegura que el prisionero político cubano podría extinguir su sanción en el campamento La Lima, en Guanabacoa.
Léster Fernández, hermano de Luis Robles está detenido desde hace un mes por un intento de salida ilegal. Todos los implicados, sin embargo, están en libertad, denuncia su madre.
Léster Fernández está detenido desde hace un mes por un intento de salida ilegal. Todos los implicados, sin embargo, ya están en libertad.
'Luis se encuentra sin atención médica y ellos están mintiendo al decir que sí', asegura Yindra Elizástigui.
Denuncia que las autoridades niegan a su hijo el paso a un régimen de mínima severidad.
Yindra Elizástigui Jardines vendió su casa en Guantánamo y malvive en La Habana para ayudar a su hijo. Lo cuenta en esta entrevista con DIARIO DE CUBA.
Las autoridades cubanas negaron el traslado de Robles a un régimen de mínima severidad el pasado mes de julio.
El cubano cumple cinco años de prisión desde diciembre del 2020, cuando fue arrestado por exigir la libertad del rapero Denis Solís en el Boulevard de San Rafael.
'Ya comencé y no paro hasta que Luis Robles esté en la calle. Esa es mi posición', dice Yindra Elizastigui.
El procedimiento, presentado por su hermano, solicita el traslado del joven a un régimen de mínima severidad.
'No sé qué tienen planeado, me intriga para qué fueron esas fotos', dice el joven condenado a cinco años de prisión.
El prisionero político cubano fue sentenciado a cinco años de prisión por pedir el cese de la represión pacíficamente en una calle de La Habana.
El recurso se apoya en el 'quebrantamiento de forma' del proceso y en que la sentencia 'no se ajusta a derecho'.
El Tribunal Provincial Popular de La Habana lo condena por los delitos de propaganda enemiga y desobediencia.